Español abajo

Brussels – To mark World Fisheries Day, environmental NGOs created a visual reminder of how large and plentiful fish once were, outside the Council meeting of EU agriculture and fisheries ministers. NGOs urged the ministers and the Commissioner responsible for ocean and fisheries to return EU fish populations to their former abundance and finally end overfishing, by setting fishing opportunities in line with scientific recommendations.

The action, “Missing Fish”, provides sensory reminders of the historical size and abundance of fish and recalls some of the most depleted populations in the Northeast Atlantic such as West of Scotland cod, Celtic Sea herring and Irish Sea whiting, as well as Mediterranean hake and eel. It takes place in the context of current negotiations to set catch limits for Northeast Atlantic fish stocks and restrict fishing effort in the Mediterranean in 2023. The agreed fishing opportunities will be adopted at next month’s agricultural & fisheries Council meeting in Brussels (12-13 December). 

Vera Coelho, Senior Director of Advocacy at Oceana in Europe said “Despite repeated EU and international commitments to end overfishing, it persists and dozens of European fish populations remain in a critical state. Ministers must treat fish as not just numbers but as a fundamental part of ocean life, on which we all depend. Rebuilding abundant fish populations will benefit fishers, marine life and ocean health – there is no good reason to keep delaying action.”

Overfishing is the most serious threat to our ocean. It is the leading driver of marine biodiversity loss and critically undermines the resilience of fish and other wildlife to climate change. The EU has failed to meet the legal deadline to end overfishing by 2020, set in the Common Fisheries Policy (CFP) and in UN Sustainable Development Goal commitments. Although the EU annually reaffirms its commitment to sustainable fishing, it continues to ignore the scientific advice  by the International Council for the Exploration of the Sea (ICES) when setting fishing quotas for several fish populations. Environmental NGOs are calling on EU decision makers to take a more precautionary and long-term approach to save our fish and marine ecosystems. Only sustainable and low-impact fisheries that put the health of fish stocks at their core will ensure fish for human consumption in the long run.

“EU governments and the EU Commission must take urgent action to protect the ocean’s carbon system so that fish can carry out their vital role as carbon engineers – capturing, sequestering and storing carbon”, said Our Fish Programme Director Rebecca Hubbard. “With COP27 behind us and Montreal’s Biodiversity COP15 fast approaching, the EU must transform biodiversity and climate pledges into action by supporting ecosystem-based fisheries management as good carbon management, which will also bring great benefits in terms of ocean resilience and adaptation.”

Year after year, over 20 Northeast Atlantic fish stocks are severely depleted and many others are overfished. Examples of these include Western Baltic herring; Western Atlantic horse mackerel; and Celtic Sea whiting. But it is cod, an iconic and much-loved species, which is in a particularly dire state, with all stocks, from the North Sea to the west of Scotland, Irish Sea or Celtic Sea, at, or near, historically low levels. For most of these severely overexploited species, scientific advice from ICES recommends either a major reduction in catches or no catches at all.

According to a European Commission report on the performance of the CFP from April 2022, 28% of assessed Northeast Atlantic fish stocks and 86% of those in the Mediterranean and Black seas remain fished above sustainable levels. Another recent report by ClientEarth highlights that the EU has made particularly poor progress in following scientific advice for data-limited stocks, and has been much less likely to follow its own recommendations to reduce catches compared to recommendations that support catch increases.

“European eel is one of these data-limited stocks for which scientific advice is not followed. We have a critically-endangered species, with zero catch advice, and still fishing is allowed to continue in most of its geographical range. It is in breach of both fisheries and conservation objectives, and it has to stop before it is too late,” said Niki Sporrong, Senior Policy Officer & European Eel Project Manager at The Fisheries Secretariat.

Photos and video available here

ONG reclaman a los ministros del Consejo de la UE que no permitan que los peces se conviertan en un recuerdo del pasado

Bruselas – Con ocasión del Día Mundial de la Pesca, varias ONG medioambientales han llevado a cabo en Bruselas una acción interactiva sobre lo abundantes que fueron las poblaciones de peces en el pasado. Las ONG reclaman a estos ministros de pesca y al comisario de Medio Ambiente, Océanos y Pesca una urgente recuperación de las poblaciones de peces de aguas europeas, así como que pongan fin de una vez por todas a la sobrepesca, estableciendo límites de captura de acuerdo con las recomendaciones científicas.

Esta acción, bautizada como Missing Fish (‘El pez perdido’), ofrece una experiencia sobre las dimensiones y abundancias históricas de las poblaciones de peces y nos recuerda algunas de las especies más esquilmadas en el Atlántico Noreste, como el bacalao en el Oeste de Escocia, el arenque en el Mar Céltico o el merlán en el Mar de Irlanda, así como la merluza y anguila mediterráneas. Esta acción se enmarca en el contexto de las actuales negociaciones para establecer límites de captura en las pesquerías del Atlántico Noreste y restringir el esfuerzo de pesca en el Mediterráneo para 2023. La decisión final se adoptará en la próxima reunión mensual del Consejo de ministros de agricultura y pesca en Bruselas los días 12 y 13 de diciembre.

Según Vera Coelho, directora sénior de Oceana en Europa: “Pese a los reiterados compromisos internacionales y de la UE de acabar con la sobrepesca, esta sigue muy presente y docenas de poblaciones europeas de peces siguen estando en una situación crítica. Los ministros no deben tratar a los peces como meros números sino como una parte fundamental de la vida marina, de la cual todos dependemos. Recuperar las poblaciones de peces beneficia a los pescadores, a la vida marina y a la salud de nuestros mares, así que no hay ninguna razón de peso para seguir demorando el fin de la sobrepesca.”

La sobrepesca constituye la amenaza más grave para nuestros mares. Se trata del mayor factor de pérdida de biodiversidad marina y está socavando drásticamente la resiliencia al cambio climático de los peces y del resto de vida salvaje. La UE ya incumplió su compromiso formal de acabar con la sobrepesca en 2020, establecido en la Política Pesquera Común (PPC) y en los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU. Y, aunque todos los años la UE ratifica su compromiso con la pesca sostenible, sigue ignorando los consejos científicos a la hora de fijar las oportunidades de pesca para numerosas poblaciones de peces. Las ONG medioambientales hacen un llamamiento a los responsables de la UE para que adopten un enfoque más precautorio y a largo plazo con el fin de salvar nuestros peces y ecosistemas marinos. Solo una pesca sostenible y de bajo impacto, que anteponga la salud de las poblaciones de peces, puede asegurar el abastecimiento de pescado a largo plazo.

“Los Gobiernos de la UE y la Comisión Europea deben adoptar actuaciones urgentes para proteger el sistema de carbono de los océanos, de manera que los peces puedan seguir desempeñando su vital papel en la captura, secuestro y almacenando de estas emisiones”, afirma la directora del programa Our Fish, Rebecca Hubbard. “Con la ya pasada COP27 y la inminente Conferencia de la ONU sobre Biodiversidad (COP15) de Montreal, la UE debe traducir en acciones sus compromisos en materia de biodiversidad y clima, promoviendo una gestión ecosistémica de la pesca, lo que también aportará grandes beneficios en términos de resiliencia y adaptación del mar.”

Año tras año, más de 20 poblaciones de peces del Atlántico Noreste se encuentran gravemente sobreexplotadas y muchas otras también sufren la sobrepesca. Por ejemplo, la anchoa en aguas atlánticas Ibéricas, el jurel en el Atlántico Occidental, las cigalas del Cantábrico o la sardina de la Bahía de Vizcaya. Pero es el bacalao, un pescado icónico y muy apreciado, el que se halla en una situación especialmente crítica, con todas sus poblaciones —desde el mar del Norte hasta el oeste de Escocia, o el mar de Irlanda y el mar Céltico— prácticamente en sus niveles históricos más bajos de abundancia. Para la mayoría de estas especies gravemente sobreexplotadas, el consejo científico recomienda una reducción drástica de capturas, o incluso una suspensión total de las mismas.

De acuerdo con un informe de la Comisión Europea sobre el funcionamiento de la PPC de abril de 2022, alrededor del 28% de las poblaciones pesqueras evaluadas del Atlántico Noreste y el 86% de las Mediterráneas continúan explotadas por encima de niveles sostenibles. Otro informe reciente de ClientEarth subraya que la UE muestra progresos especialmente pobres en el seguimiento de los consejos científicos para las poblaciones pobres en datos.

“La anguila europea es una de esas poblaciones con datos limitados para la cual no se están siguiendo las recomendaciones científicas. Existen especies declaradas en estado crítico que cuentan con recomendación de ‘capturas cero’, y para las que sin embargo se sigue permitiendo su pesca en la mayor parte de su área de distribución. Esto constituye una violación tanto de los objetivos de explotación como de los de conservación. Su pesca debe cesar antes de que sea demasiado tarde”, ha declarado Niki Sporrong, responsable sénior de políticas y directora del European Eel Project (‘proyecto de la anguila europea’) de The Fisheries Secretariat.

Fotos y vídeo disponibles aquí